Primer
rey de
la Corona de Aragón
Nació en Huesca el 24 de Marzo de 1157.
En el testamento de la reina Petronila, su madre, llama a su heredero
Alfonso y señala que su marido lo llamaba Ramón. La documentación
de la época confirma que desde su nacimiento fue designado por los
dos nombres indistintamente: Alfonso y Ramón.
Hijo primogénito de Ramón Berenguer
IV el Santo -conde de Barcelona y desde 1137 príncipe de Aragón y
conde de Barcelona- y de Petronila, reina titular de Aragón, reinó
con el nombre de Alfonso en honor a Alfonso I el Batallador hermano
de su abuelo. Al cumplir la edad legal -siete años- para poder asumir
la dignidad regia, recibe de su madre -la reina Petronila- en 1164,
conjuntamente el Reino de Aragón y el Condado de Barcelona, que tras
la incorporación del Reino de Valencia, y desde la última década del
siglo XIII, comenzarán a recibir la denominación de Corona de Aragón,
si bien entre el siglo XII y el XIV la expresión más extendida para
referirse a las tierras y pueblos del rey de Aragón fue la de «Casal
d'Aragó».
Se casó en Zaragoza con Sancha
de Castilla y Polonia (tía de Alfonso VIII de Castilla) el 18
de Enero de 1174, a la edad de 16 años, a la que, según el Derecho
Canónico, un hombre casado alcanzaba la mayoría de edad. Además,
con ello fue armado caballero y pudo actuar al frente de su
reino sin la tutoría de los magnates, que la habían ejercido
desde 1162.
Incorporó a su reino las tierras occitanas de Provenza, el Rosellón y el Pallars Jussà. Firmó con
su cuñado, el rey castellano Alfonso VIII, el tratado de Cazorla en 1179, pero años más tarde
y mediante el tratado de Huesca (1191), se alió con los monarcas de León, Portugal y Navarra contra
la hegemonía castellana. Su hijo Pedro II le sucede en las posesiones peninsulares. Amparó las artes y las normas del amor cortés y él mismo se ejercitó en la poesía, intercambiando
escritos con importantes trovadores de la época como Giraut de Bornelh.
Teniendo que escoger ser enterrado
en el mausoleo paterno en el Monasterio de Ripoll, o ser enterrado
en el mausoleo conyugal del Monasterio de Sigena, escogió el
Monasterio de Poblet para no levantar suspicacias. Su testamento
especifica que, en caso de haber conquistado Valencia en vida,
debía ser enterrado en El Puig (Valencia), lugar que ya había
donado al monasterio de Poblet en Febrero de 1176, deseo expresado
también por su hijo Pedro II de Aragón y muerto también sin
cumplirlo.
Varios de los condes de Barcelona desde Wifredo el Velloso habían sido enterrados en Ripoll,
mientras que otros lo fueron en otros lugares, entre ellos el monasterio de San Pablo del Campo
y las catedrales de Barcelona y Gerona.
|
Descendencia:
- Pedro II de Aragón, el Católico
(1174 - 1213), rey de Aragón, con el nombre de Pedro II y conde
de Barcelona, con el nombre de Pedro I.
- Constanza (1179 - 1222), casada en
1198 con Emerico I de Hungría y en 1210 con Federico II Hohenstaufen,
Sacro Emperador Romano Germánico, Rey de Sicilia y Rey de Jerusalen.
- Alfonso (1180 - 1209), conde de Provenza,
con el nombre de Alfonso II.
- Leonor (1182 - 1226), casada
en 1202 con Ramón VI de Tolosa.
- Sancha (1186 - 1241), casada
en 1211 con Ramón VII de Tolosa.
- Sancho, muerto joven.
- Ramón Berenguer, muerto joven.
- Fernando (1190 - 1249), entró como monje cistercense en el Monasterio de Poblet.
- Dulce (1192 - ¿?), entró como monja en el Monasterio de Sijena, llegando a ser comendadora de
la Orden de San Juan.
En su testamento, Alfonso II dispuso
que, a su muerte -ocurrida en Perpiñán el 25 de
Abril de 1196- sus territorios se repartieran entre sus dos
hijos: Pedro, rey de Aragón y conde de Barcelona (1196-1213),
y Alfonso, conde de Provenza, Milhau y Gavaldá (1196-1209). Con esta disposición testamentaria, además de dotar de un dominio a su hijo menor, el rey
sancionó la necesidad de Provenza de disponer de un gobernador propio. En 1185, Alfonso II
había nombrado conde de Provenza a su hijo Alfonso, menor de edad; por eso, el rey encargó el
gobierno provenzal a procuradores, como Roger Bernat de Foix (1185-1188), Barral de Marsella
(1188-1192) y Lope Jiménez.

Rey de Aragón y Conde de Barcelona,
fue apodado El Casto porque no se le conocían hijos fuera del matrimonio.No
practicó la castidad del todo, puesto que tuvo hijos con su mujer
Sancha de Castilla, pero esa moderación sorprendía en sus tiempos.
Y eso que Alfonso II amparó las artes y normas del amor cortés y él
mismo se ejercitó en la poesía trovadoresca. A su muerte, dividió
el reino entre sus hijos, Pedro y Alfonso.
§§§§§§§§§§----------------
|